sábado, 29 de mayo de 2010

no tengo ganas de escribir. No tengo ganas de escribir. ¡No tengo ganas de escrbir más carajo! No quiero escribir ni una palabra más. Me siento totalmente incomodo con las frases. No quiero escribir, no lo haré. No tengo ganas de escribir. Eso me recuerda en el pensamiento del otro día. Estar enojado, no al caso. Esque simplemente no tengo ganas de escribir. Y se los juro: no voy a escribir, de verdad. Mañana redactaré, si, eso haré. Tengo ganas de redactar. Me olvidaré de aquella persona. Pero esta noche no escribiré nada. No tengo ganas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario